GUNE es un libro editado por el Departamento de la mujer de la Concejalia de cultura y bienestar social del Exmo. Ayuntamiento de Cáceres.

Dicen los buenos escritores que cuando escriben un libro, sus personajes cobran vida y toman las riendas de sus destinos.

Salvando las distancias, Gune y Ya, me hicieron lo mismo. No se en que momento deje de ser «escritora» para ser amanuense de lo que ellas querían decir.

Gune la que todavía no es fuerte, la joven buscadora del Yo

Ya, mujer, plena, tierra, madre, naturaleza, abrigo, cobijo, fortaleza.

El mismo nombre para historias distintas, cada una contando su momento cumbre en la vida, unas fuertes, buscando en la Matriz de la Madre su fuerza y su destino, otras perdiéndose en la búsqueda. Gune y Ya somos todas y cada una de nosotras a lo largo del tiempo antes ahora y después. Somos parte de la naturaleza y de la Gran Madre.

Solo tenemos que buscar para encontrar nuestro destino.

Cada capitulo es una historia es un momento cumbre en la vida de Gune que la enfrenta al hecho de convertirse en Ya, la decisión puede cambiar el destino, o rechaza la oportunidad de ser Ya, mujer plena y consciente de su poderío. para seguir siendo una Gune.

Presentación del libro

Conocí a Marisa Escudero hace algunos años; y nos unió la palabra, esas palabras que cada semana lanzábamos al aire, en medio algunas veces de discrepancias y sin sabores. Las tertulias Radiofónicas compartidas, pasaron con el tiempo, a convertirse en un mano a mano dialéctico; ahí descubrí o recupere el Arte de escuchar; acostumbrado como estaba a no parar de hablar yo solo ante un micrófono ante oyentes invisibles y amordazados; con ella, con Marisa  aparecieron personas desconocidas que compartían con nosotros el amor por nuestra lengua y lo que con esta puede hacerse: unir o separar, ella hacia que aquellos que nos escuchaban cada semana tendieran a estrechar lazos.

Gracias a estas sesiones de radio, tuve la oportunidad de conocer su obra pictórica «Admirable» sus colaboraciones y entrega desinteresada con los mas desflorecidos y en definitiva sus eternas ganas de luchar por las mujeres; Ella misma se encargaba de recordarnos que no las representaba, que simplemente pertenecía a un genero  que en otros momentos no lo tuvo tan fácil.

Si leer a Marisa Escudero es algo parecido a lo que se siente ante uno de sus cuadros, merecerá la pena.

Marisa Escudero está cruzando ese puente imaginario que nos sostiene a todos; algunos los que tienen demasiadas prisas intentarán ponerle zancadillas, otros los que admiran  el paisaje y la vida, le abrirán paso, porque ella nos lo abre constantemente.

Gracias Marisa por tu talento y por haberme proporcionado momentos memorables.

Felix Roa.